PescaMar

Número 129 / Diciembre 2013

En busca del pargo, el tesoro más codiciado de las profundidades. Spinning: Anjovas en pajarera. Surfcasting: Aprendiendo a 'leer' playas de fondo mixto. Viajes de pesca: Atunes gigantes de Prince Edward Island. El emerillón, una pieza esencial en nuestros aparejos. Prueba: Equipo de surfcasting Cinnetic Cautiva y Cyclone.
PescaMar 129
Artículos destacados
Biología
Conociendo al pargo: Datos biológicos de “Pagrus pagrus” de interés para el pescador
Las cada vez mejor equipadas y más fiables motoras que sirven a tantos pescadores de recreo como plataformas desde las que practicar su afición en el mar, tienen en los fondos de roca al pargo como uno de los espáridos más apetecidos y a su alcance. Pero ¿qué sabemos del pargo?, ¿es sedentario o realiza migraciones más o menos significativas?, ¿cuáles son sus presas y -en consecuencia- qué cebos podemos emplear con él?, ¿cómo es su crecimiento?, ¿cuál es su situación ecológica actual? A éstas y a otras preguntas sobre su biología pretendo dar respuesta en este texto, pero no sólo para tener un mejor conocimiento del ciclo vital de este pez que nos ilusiona, sino para acometer su pesca, para obtener más éxito.
Surfcasting
Cómo “leer” una playa de fondo mixto
A menudo, cuando acudimos a una playa de fondo mixto, lo que más nos preocupa es evitar los enganches y enroques. Pero lo que en realidad debería preocuparnos es cómo encontrar esos tramos en los que con alguna certeza podamos poner nuestros cebos en el camino de los peces de la zona. Si empezamos con los enganches en mente mal empezamos…; acudir a un pesquero con miedo a enganchar y no buscar su potencial nos lleva muchas veces a no lograr resultados o a obtenerlos muy por debajo de las posibilidades del lugar.
Técnica
Anjovas en pajarera: Adrenalina por encima y por debajo del agua
Pocas pescas son tan emocionantes y adictivas como la de las feroces anjovas localizadas y tentadas en pajareras. El aficionado al spinning está de enhorabuena, ya que la anjova parece repuntar en sus poblaciones, y en las dos últimas temporadas volvemos a disfrutar de esas situaciones de pesca tan frecuentes antaño que nos deleitaban y nos vuelven a deleitar con espectaculares e inolvidables ataques a nuestros señuelos artificiales.
Viajes
Prince Edward Island, la casa de los gigantes: A la caza del atún rojo
Son las siete de la mañana de un típico día húmedo de septiembre en North Lake Harbour, al extremo este de Prince Edward Island, Canadá. Las características nasas de madera que se usan para pescar las langostas se están secando lentamente en los espartanos hangares que se encuentran a lo largo del canal que se abre en la parte sur del golfo de San Lorenzo, en el océano Atlántico. Es un momento importante para los habitantes del lugar, que son en gran parte pescadores, ya que muchos de ellos tienen de hecho como único pensamiento los grandes grupos de arenques -cargados de grasa y huevas- que se están acercando a la costa para la reproducción.