CorzoCuatro semanas, cuatro tareas antes del desvede corcero
Para bajar la fiebre no hay nada como una aspirina, y para calmar la sed nada como el agua. Pues bien, llegados a marzo, los que nos pirramos por el corzo estamos como el que tiene fiebre o el que tiene más sed que todo un desierto. ¡Y todavía queda un mes para la apertura!