Caza menorBarbechos, el reto del perdicero
Justo donde muchos ni se atreven a ir a por ellas, allí donde la tierra “se las traga”, el barbecho, ahí es donde vamos a entrar a buscar patirrojas. Con la viña ya desprovista de pámpana y los olivares ya muy cazados, la perdiz toma ahora el escape hacia los barbechos con facilidad, y ello supone un reto extra para el perdicero que ha de valerse de piernas, resistencia, estrategia, paciencia y por supuesto buen tino con la escopeta para colgar alguna, ello sin olvidar que si no llevamos un perro que cace en condiciones, ni las veremos… ¿Te atreves a ir a por ellas a la barbechera?